Este bizcocho de remolacha y algarroba es soprendente por la inusual combinación de ingredientes. El resultado es un bizcocho tan sabroso como saludable.
Ingredientes:
1 remolacha cocida (aprox, 250 gr.)
150 gr de harina integral
3 huevos
150 ml de leche de coco
100 gr de algarroba molida
50 gr de sirope de algarroba
Una pizca de sal y un poco de manteca
Una aclaración acerca de este bizcocho: a pesar de no llevar azúcar agregada, hay que considerar que tanto la remolacha como la algarroba contienen una buena cantidad de azúcares naturales. El resultado por lo tanto será dulce, y podemos regularlo según nuestas preferencia variando la cantidad de sirope de algarroba. Vale la pena probarlo ya que si bien no se trata de una receta baja en calorías, aún así obtenemos un snack de alta calidad nutricional.
Acerca de los ingredientes:
La algarroba es una vaina muy común en los países mediterráneos. Hasta hace poco se consideraba “pasada de moda” en muchos países como España, ya que se la consideraba como un alimento barato, propio de las épocas de pobreza de la posguerra. Sin embargo, sus múltiples propiedades nutricionales la han hecho regresar a la dieta habitual de muchas personas. Su sabor recuerda al del chocolate, pero sin el alto contenido graso que presenta el cacao.
La presencia de leche de coco puede resultar llamativa en el listado de ingredientes, ya que normalmente se la asocia a recetas asiáticas. Sin embargo, no sólo nos aporta un aroma y sabor particular, sino que nos agrega un contenido graso que nos permite prescindir de la manteca, un ingrediente usual en bizcochos, muffins o brownies. Desde ya que en caso de necesidad, podemos reemplazarla por yogur natural o algún otro tipo de leche.
En el caso de la harina, es posible utilizar aquella de nuestra preferencia. La receta resulta excelente incluso aquellas con bajo contenido de gluten como la harina de trigo sarraceno, que el huevo ayuda a que la mezcla se amalgame y el bizcocho resulte esponjoso.
La receta del bizcocho de remolacha y algarroba:
Precalentar el horno a 180°. Pelar y triturar la remolacha cocida junto a la leche, los huevos y el sirope de algarroba. Separadamente, mezclar los ingredientes secos (harina, algarroba molida y una pizca de sal). Añadirlos a la mezcla húmeda y mezclar con una espátula hasta intregrar por completo, verificando que no hayan quedado grumos.
Enmantecar ligeramente una fuente para horno (con esta cantidades, he utilizado una bandeja de 20×20). Hornear por unos 20 a 25 minutos.
Consejos y sugerencias:
- En caso de contar con sirope o melaza de algarroba, es posible utilizar miel o aún mejor, dátiles medjool.
- También combinan muy bien las nueces en esta receta, las podemos agregar enteras a la mezcla o bien decorar con algunas por encima.
- Las verduras con alto contenido de azúcares naturales son una excelente opción para hornear snacks dulces saludables, como estos muffins de zanahoria.