Ensalada de bresaola, melón y mozzarella

Un antipasto especial para el verano. Con pocos toques sencillos, podremos ofrecer un entrante muy vistoso y de calidad. Esta ensalada es muy fácil y sabrosa, a la vez que refrescante y nutritiva. Además permite varios cambios en la receta, de acuerdo con los ingredientes que tengamos disponibles.

Ingredientes, en cantidades al gusto:

Bresaola, cortada en fetas muy finas

1 melón de cualquier tipo, preferentemente del tipo Cantalupo o Charentais

Mozzarella, preferentemente en pequeñas bolitas

Canónigos

Jugo de limón, aceite de oliva virgen extra

Sal y pimienta

Esta ensalada es una variante del melón con jamón crudo, un muy popular entrante en Italia. En este caso usamos Bresaola, un embutido típico de la Valtellina, producido a base de carne vacuna magra.

La receta simplemente consiste en servir los ingredientes en un bol, y aderezarlos al gusto con sal, pimienta, jugo de limón y aceite de oliva virgen extra. En cualquier variante tendremos un antipasto sabroso, pero a continuación tienes algunas sugerencias para obtener una presentación que seduzca también a la vista.

Consejos y sugerencias:

  1. Sirve el carpaccio de bresaola como base del plato y decora con el resto de los ingredientes por encima.
  2. O bien, utiliza los canónigos como base, tal como se ve en la foto de ilustración. En ese caso, enrolla las fetas de bresaola para obtener bocados similares en tamaño al melón y la mozzarella.
  3. Es posible cortar un trozo de mozzarella en trozos pequeños, pero resulta mucho más atractivo servir las pequeñas bolitas que se venden como “perlas”.
  4. Corta el melón en trozos del tamaño de un bocado, o mejor aún, forma bolas con un porcionador. Si no dispones de uno, puedes utilizar alguna herramienta similar, como por ejemplo, un dosificador de café.
  5. La dulzura de los tipos de melón indicados marida perfectamente con la carne salada, además de dar una excelente mezcla de colores a la presentación.
  6. Si lo deseas, puedes complementar la ensalada con tomates cherry cortados a la mitad.
  7. Como en otros platos similares, es posible reemplazar los canónigos por rúcula. Sin embargo, prefiero idealmente el sabor más sutil de los primeros, para darle mayor protagonismo a la combinación dulce-salada del melón y la carne.
  8. Con el mismo fin, prefiero el jugo de limón y no la crema de aceto balsámico como aderezo.
  9. Puedes reemplazar la bresaola por jamón crudo, preferiblemente de Parma.
  10. También resulta muy sabrosa la stracciatella en vez de la mozzarella. Como la misma es menos sólida, conviene en este caso servirla como relleno, colocando un poco dentro de cada feta de bresaola. Si no la consigues en el supermercado, puedes consultar aquí cómo hacer la stracciatella en casa.
  11. El carpaccio de bresaola o los arrollados de bresaola y mascarpone son otros entrantes muy apreciados con el mismo embutido como protagonista.